La rehabilitación de Casa Arraiza y su entorno, en el parque de Aranzadi, da sus primeros pasos con la licitación del contrato de redacción del proyecto de reforma y dirección de obra, aprobada este lunes por la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Pamplona.
La licitación parte de un importe máximo de 205.700 euros (IVA incluido), dividido en dos anualidades de 102.850 euros, para 2023 y 2024. La mitad del importe del contrato corresponde a la redacción del proyecto de reforma y la otra mitad, a la dirección de la obra de reforma de los edificios si, en su caso, se llega a materializar la obra.
Así lo ha dado a conocer este lunes el concejal especial de Desarrollo Sostenible y Proyectos Estratégicos del Ayuntamiento de Pamplona, Aitor Silgado, en una rueda de prensa tras la Junta de Gobierno Local.
El contrato contempla la redacción del proyecto de reforma de Casa Arraiza, Casa de Invitados y espacios exteriores de la parcela que acoge estas edificaciones, en el parque de Aranzadi. La intervención pretende rehabilitar tanto los edificios como el entorno, que se encuentran «en estado de deterioro», para destinarlos a usos de interés general, como una zona de hostelería en la planta baja y una zona de exposiciones en plantas elevadas del edificio.
Según ha explicado Silgado, «además de contar en planta baja con una zona hostelera y en primera planta unos diferentes espacios polivalentes que podrán albergar salas de exposición, talleres y diversos usos, también se va a llevar a cabo el impulso de un nuevo modelo innovador en la ciudad de una ‘casa para artistas’» en la que se espera acoger a invitados internacionales de diferentes disciplinas, que podrán llevar a cabo diferentes creaciones y exponer su trabajo posteriormente.
«Es en la Casa de Invitados donde se va a rehabilitar o construir un nuevo espacio donde esté abierto para que puedan venir artistas de cualquier disciplina -porque hay disciplinas que no tiene que venir solo una persona sino que tendrían que venir más- para que puedan estar una estancia indeterminada -que se acordaría con el artista, viendo las necesidades que pueda tener- donde pueda crear también, tanto ahí como en la Casa Arraiza. Y que toda la creación o todo lo que le inspira o se base en Pamplona, se pueda exponer», ha remarcado.
Para ello, ha añadido, «habría que crear ciertos convenios», y «hay otros casos como en Casa de Velázquez, en Madrid, o también en Bilbao que nos pueden servir de inspiración para llevarlo a cabo». Ha añadido Silgado que «en primer lugar estamos viendo cómo se va a desarrollar el proyecto», y posteriormente, ya con las áreas de Turismo, Comercio y Cultura «habría que ver cómo se lleva la gestión de este espacio».
La dirección técnica de la obra queda condicionada a la futura adjudicación del contrato de obra que se realice sobre la base del proyecto de reforma aprobado. La duración del contrato correspondiente a la redacción del proyecto será de 120 días naturales, mientras que la dirección de obra durará lo mismo que dure la ejecución de los trabajos.
El anteproyecto de redacción deberá entregarse en un plazo máximo de 30 días naturales y el proyecto de ejecución, en 90 días naturales. El contrato no contempla posibles prórrogas. Los criterios de adjudicación incluyen la propuesta técnica, valorada hasta con 70 puntos; la oferta económica, con un máximo de 20 puntos; y el criterio social, con 10 puntos.
UN SIGLO DE HISTORIA
La denominada Casa Arraiza y la Casa de Invitados se encuentran «en estado de abandono» en el parque de Aranzadi, en una parcela situada entre el complejo deportivo y Casa Gurbindo. El área, con una superficie de 7.650 metros cuadrados, cuenta con cuatro accesos, una pista de tenis, zonas arboladas y un refugio para gatos. Una vez recuperada la zona, podría albergar una zona de hostelería y otra de exposiciones, según los resultados de un concurso público de ideas.
El edificio Casa Arraiza se construyó en 1915, según el proyecto del arquitecto Emilio de Otaduy promovido por el industrial de origen vizcaíno José Luis Ybarra. Originalmente, constaba de sótano, planta baja y planta superior, con un estilo de casa típica andaluza, un patio central con una fuente arabesca, azulejos en fachada y paramentos interiores.
En el entorno se halla un cenador con cubierta de cúpula de hierro, una zona de pérgolas con arbustos ornamentales y bancos de piedra y un jardín arbolado con diferentes especies.
La Casa de Invitados data de mediados del siglo pasado y fue construida para los guardas y jardineros. Consta de planta baja en toda su extensión y de planta primera en la parte oeste. Es una casa – patio a la que se accedía originalmente a través de una galería arcada. En el centro del patio hay un pozo y, en la fachada del cuerpo alto, una jardinera escalonada sustentada en ménsulas de piedra.
Entre los dos inmuebles se encuentra una antigua pista de tenis, «invadida» por hierbas y arbustos de bajo porte y flanqueada por árboles y arbustos de tamaño medio. Frente a la Casa de Invitados se encuentra el refugio Aranzadi Katuak, dedicado al cuidado y protección de gatos, que consta de un edificio de «precaria construcción» y un recinto vallado anexo.
El Ayuntamiento de Pamplona adquirió la parcela entera en 2008, con motivo de las obras de reforma del parque, pero se firmó un convenio con la familia Arraiza para que pudieran habitar la casa hasta la ejecución de la segunda fase del parque. Desde entonces, las partes de la parcela y la casa que no han estado habitadas «han sido vandalizadas de forma reiterada».
Tras la salida definitiva de la familia Arraiza por las obras de la segunda fase de Aranzadi, en julio de 2022, el Ayuntamiento de Pamplona tapió los accesos a ambas casas como medida preventiva.
Deja una respuesta